lunes, 5 de octubre de 2015

Mi ordenador en el Limbo y la espiral de malas decisiones

Vuelve el lunes, hoy triplete de posts… esto es un no parar :D Bueno, bueno, a ver si voy volviendo a postear cosas interesantes… ya tengo otro en el tintero que ya dejaré para mañana (por no hacerme pesado). 

El fin de semana ha pasado con más "pena" que gloria… nada malo a pasado, pero tampoco nada bueno. Pude dejar listo mi W10 funcionando sin problema (se cargó el grub y Linux ya no salía al arrancar). El problema es que tengo los discos duros hechos un Cristo… y mi intención posterior fue poner un poco de orden… cagada! Bien, digo que están mal porque en aquel momento estaba la cosa así:
  • Disco duro HDD 250GB
    • Partición en ext4 de 215 GB dedicada a la partición /home de Linux (dónde van los archivos personales y conf de sistema, eso que no se borra)
    • Partición en NTFS de 35 GB dónde originalmente estaba Win7 y luego W10 (la que jodía el jueves intentando clonarla al SSD y al final me cargué el arranque del sistema al formatear)
  • Disco duro SSD 60GB
    • Partición en ext4 de 30GB dedicada a la partición / de Linux (donde instalo el sistema y puedo ir formateando sin perder datos)
    • Partición en NTFS de 30GB dónde instalé Win10 de cero y que dejé funcionando el sábado por la mañana.
Bien, pues ante este panorama mi intención para poner orden fue pues reduzco la unidad de 215GB (HDD) para aumentar la de 35GB (también HDD) para así tener una unidad de almacenamiento en Windows… poco a poco ir pasando cosas a esa unidad e ir haciéndola más grande en detrimento de la primera. Entonces formatear esa unidad NTFS para tenerla limpia. Y aquí es dónde se produce el error garrafal… resulta que en esa mierda de unidad estaba guardado el arranque de mi Win10, aunque estuviera en la SSD (cosa que desconocía y en cierta manera no entiendo).

Total que ahora tengo una unidad NTFS en el SSD con mi W10 recién instalado, puesto a punto con programas y juegos pero no puedo arrancarlo. He probado muchas cosas… la reparación con el disco de win10, instalar eOS (y también Ubuntu) en otra partición para que así me detecte Win10 y aparezca en el Grub… y nada… que no consigo que me de opción de arrancar.

Lo próximo que intente serán dos cosas, por este orden. Primero haré una copia de toda la unidad (por si a caso) y después miraré sin con el disco de win10 hay alguna opción de reinstalar el sistema sin perder los datos… Mi segunda flecha, si la primera falla, será formatear todo a saco y volver a instalar Win10 de cero. Después con un LiveUSB sobreescribiré todo lo que pille con la copia que guardé. Con eso debería funcionar puesto que el arranque no cambiará (porque en mi copia no está) pero sí el resto del sistema… probaremos a ver qué tal…

La tercera flecha, muy a mi pesar, si todo falla, será instalar de cero otra vez y dedicarme a instalar todo otra vez :( espero no tener que recurrir a esa flecha.

En fin, lo dicho, más backups y menos toqueteo insano :S

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