Ahí es
donde entra la teoría del experto en robótica Masahiro Mori. La teoría del
valle inquietante nos explica que la percepción que un humano tiene de un robot
es más empática y agradable cuanto más se asemeja su aspecto al de un humano.
Sin embargo hay un punto en el que esto se invierte, si el aspecto del
humanoide es demasiado parecido al de un ser humano pero se nota que no lo és nos
producirá rechazo. Después de eso la sensación de agrado regresa conforme es
indistinguible de un ser humano. La teoría se llama así, del valle inquietante,
porque en la gráfica se forma un valle como podéis ver a continuación, en ese
valle el robot o humanoide nos parecerá inquietante (o nos daría grima).
Os dejo
también unos vídeos sobre el UnrealEngine 4 y sobre el render de la cara de una
persona.
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