Estamos a lunes y estrenamos mes de abril. Esta semana hará dos desde el último capítulo del podcast y veo complicado grabar nada. Estaba preparando un capítulo sobre la identidad digital de la unión europea y el euro digital pero no sé si podré terminarlo y ponerme a grabar. Realmente quiero hacer tantas cosas que no sé cómo puedo ponerme a hacerlas. Luego llega cuando tengo algún momento disponible y termino perdiendo el tiempo. Este fin de semana hemos comprado por fin la cama de la peque y me llega mañana. Espero poderme poner esta semana con eso y dejarla lista para que pueda usarla cuando a ella le apetezca. La paternidad es compleja y en estos tiempos que me ha tocado vivir es difícil tomar decisiones que van contracorriente, al menos respecto a generaciones anteriores. Llega un punto en el que te preguntas si lo que haces es alternativo o si es un subproducto más de la generación en la que te ha tocado estar. Lo digo porque muchas veces miro atrás y me fijo en hacerlo diferente de cómo lo han hecho otros en el pasado y no me fijo en mirar a un lado donde quizá hay muchísimas otras personas haciendo lo mismo que yo. De ahí la duda de si lo que hago es fruto estar informado y pensar que hago lo mejor o si realmente me limito a seguir la corriente que impera en mi tiempo.
En fin, este año no hago ningún día de fiesta, quitando el viernes y el lunes que son festivos. Eso hace que tenga por delante cuatro días en los que no puedo teletrabajar pero en los que no tengo que trabajar ninguna tarde (algo es algo). Este miércoles proceso ya el lote de kombucha y lo pasaré a embotellado. Volveré a hacerlas de jengibre y limón y esta vez probaré a dejarlas en la botella sin refrigerar por dos o tres días a ver si así genera más gas. Creo que en cuanto procese el lote me pondré a hacer otro nuevo pero con el recipiente de 4 litros. Más que nada porque me conozco y sé que luego se me terminará la kombucha y no me pondré a hacer nueva hasta pasados unos días. Y teniendo en cuenta que necesito como unos 15 días desde que comienzo hasta que me la puedo beber… pues mejor adelantar el proceso más o menos para que no pase muchos días sin.
Todavía estoy esperando que me llegue la batería 16340… y cada vez tengo menos esperanza… esta era la tercera vez que la había comprado, tiene mal de ojo. A ver si me llega estos días y me puedo poner a mirarlo porque creo que no cabe dentro de la cabeza del robot y tendré que diseñar una nueva. Por otro lado quizá en algún momento quiera montar el robot Otto pero con una placa ESP32 en lugar de una Arduino nano, de esa manera tendrá conexión wifi y supongo que se podrá controlar a distancia. Lo de siempre, muchas ideas y poco tiempo y ganas… En fin, os dejo que es lunes… muchos ánimos para esta semana atípica.
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